lunes, 23 de mayo de 2016

SENTIDO LITERAL Y FIGURADO - 8°

Significado literal y sentido figurado – Nivel: 8°

El sentido literal de una palabra o expresión (dicho) es su significado propio, concreto, objetivo, mientras que el sentido figurado es un significado diferente o metafórico de la misma palabra o dicho. Por ejemplo:

El sentido literal de la expresión “estirar la pata” es “extender la pierna, un animal o persona”; mientras que su sentido figurado es el de “morir”. Así mismo, “acolitar” literalmente es “desempeñar las funciones del acólito o monaguillo, mientras que su sentido figurado en Colombia es del de apoyar, encubrir o alcahuetear las malas acciones de una persona amiga.

El sentido literal es similar al sentido denotativo porque ambos se refieren al sentido concreto de una palabra. Y recordemos que el sentido denotativo se opone al sentido connotativo, que se refiere a otros conceptos u otros términos que son evocados por una palabra. Por ejemplo: el sentido denotativo de “sol” es el de “estrella o astro alrededor del cual gira la Tierra”, pero así como “sol” denota una estrella, “sol” también connota o evoca otros conceptos tales como “persona adorada”, “guía”, “fuente de alegría”, etc., o sea significados connotativos de Sol.

El significado figurado es similar, aunque no igual, al sentido metafórico porque la metáfora es la comparación de una cosa con otra, con base en que ambas cosas o conceptos tengan un elemento en común. Por ejemplo, en “sus palabras son un bálsamo”, entre palabras y bálsamo se insinúa que tanto las palabras como el bálsamo tienen en común la capacidad de aliviar o de calmar.

Para comprender mejor la diferencia entre sentido literal y figurado es conveniente analizar otros ejemplos:


Palabra o expresión
Sentido literal
Sentido figurado
cuello de botella
Parte superior, estrecha
de un recipiente.
Situación difícil, un impase
echar flores
Arrojar o lanzar flores
Adular o elogiar con palabras.
mucha tela por cortar
Mucha para cortar con
tijeras
Mucho queda por hacerse
o decirse.

miércoles, 18 de mayo de 2016

ETIMOLOGÍA Y SIGNIFICADOS - Nivel 8°

Etimología y significados - Nivel: 8º
El objetivo principal de esta lección o lectura es estimular el enriquecimiento del vocabulario, deduciendo el significado de nuevas palabras a partir del signficado de los elementos etimológicos que componen las palabras.

La etimología es una especialidad lingüística que estudia el origen y evolución de las palabras tanto en su forma como en su significado. Si la palabra tiene varias acepciones, la etimología señala cuál fue la primera.

Un ejemplo de estudio etimológico es el origen y evolución de la palabra “usted”. La teoría más aceptada es que se deriva de la expresión “vuestra merced” que se introdujo a principios del siglo XV, en vez del pronombre vos, para expresar respeto a los reyes y nobles, luego se transformó en uasted (1617), vusted (1619), vuested (1635), hasta llegar al actual usted. Recordemos que según el rango de las personas en la sociedad se han utilizados diversas expresiones como “Su Majestad” (al rey o reina), “Su Santidad” (el Papa) “Su Eminencia Reverendísima” (para cardenales), “Reverendísimo Monseñor” (para obispos), “Reverendo Padre” (para curas o sacerdotes).

La mayoría de las palabras del español o castellano, por ser una lengua romance, tienen su origen en el latín vulgar que introdujeron los romanos al conquistar la Península, y así mismo del griego, pero a través del latín. Otras lenguas tuvieron influencia en la formación de palabras, especialmente el árabe ya que los moros ocuparon buena parte de la Península por ocho siglos. Otras lenguas han influido el léxico del español como es el caso del francés, el italiano y últimamente, con mucha fuerza el inglés.

Castellanización. Consiste en adaptar una palabra de un idioma extranjero a la ortografía del español. Por ejemplo, fútbol es la palabra castellanizada de foot ball en inglés; diletante es la castellanización de la palabra italiana dilettante.

Del latín (latinismos): agua (del lat. aqua), ciudad (de civĭtas o civitātis), comunión (de communio), dudar (de dubitāre) hijo (de filius), huevo (de ovum), legal (de legālis), letra (de littĕra), ley (de lex o legis), lluvia (de pluvia), madre (de mater o matris), padre (de pater o patris), pueblo (de popŭlus), puerta (de porta), puerto (de portus)

Del griego (helenismos): afonía de án- sin y fonía, voz): falta de voz; amorfo (á- sin y morfo- forma): que no tiene forma; anaerobio (á, sin, aero, aire y bio, vida): que puede sobrevivir sin oxígeno;  cronómetro (cronos tiempo y metrón medida), aristocracia (aristos, el mejor y cracia, gobierno); demagogo (demos, pueblo y gogos, conductor, líder): que se hace popular alabando o con falsas promesas al pueblo; díptero (di-, dos y pteros, alas): insecto de dos alas; ecografía (de eco, sonido y grafía, escritura); ecología (de ecos, casa y logía, tratado, estudio); fotofobia (de fotos, luz y fobia, miedo); hidroterapia (de hidro, agua y terapia, curación, tratamiento); misantropía (de misos, odio y antropos, hombre); neologismo (de neo, nuevo y logos, palabra); ortopedia ( de ortos, recto y paideia, educación); pedagogía (paidón, niño y agein, conducir, educar);   pterodáctilo (pteros, ala y dactylus, dedo): dedos alados, con membranas como los murciélagos;  telescopio (de tele, lejos y scopos, observar); topónimo (de topos, lugar y ónoma, nombre): nombre de un lugar; zoolatría ( de zoo, animal y latría, culto, adoración).

Del árabe (arabismos): alacena, alcalde, alarido, albacea, alcoba, alcohol, albóndiga, aljibe, alfanje, algarabía, álgebra, baladí, balde, barrio, bazar, berenjena, cimitarra, daga, dársena, falúa, faquir, gabela, guarismo, guitarra, jabalí, jaque, lima, limón, mengano, naranja, quilate, quina, quiosco, recua, siroco, sultán, tarifa.

Del francés (galicismos): afiche (de affiche) amateur (aficionado, novato), vedette (bailarina estrella), carné o carnet, champaña (de champange), chef, plafón (de plafond), rond point (rotonda o glorieta), menú, popurrí (de potpourrí)

De origen alemán (germanismos): dardo, guante, yelmo, kínder (parvulario)

Del italiano (italianismos): birra (cerveza), espagueti (de spaghetti), facha (aspecto, de faccia), chao o chau (de ciao), diletante (aficionado a un saber o arte, de dilettante), pizza, soprano, tiramisú,

Del inglés (anglicismos): bloquear (de to block) boom (auge, éxito), clic (de click), béibol (de base ball), voleibol (de volleyball), gol (de goal), fashion (moda), rating (índice de audiencia), software, Western (película del Oeste), VIP (“vi ai pi”, de very important people),

Extranjerismos
Los extranjerismos son palabras que un idioma toma de otro, bien sea para llenar un vacío semántico (un término no existente para algo que se quiere nombrar) o bien para tener alternativas de un término. Por ejemplo, la palabra software se adoptó en español ante esa nueva realidad tecnológica, y la palabra amateur se ha admitido como alternativa de aficionado o de novato.
En español, son extranjerismos rechazados algunas voces de idiomas extranjeros que se consideran innecesarias—incluso son consideradas barbarismos—pues ya existen palabras en el español que pueden emplearse en vez de ellas. Ejemplos: banear (Ing. to ban): bloquear, suspender; banner (Ing.): pendón, bandera; copyright (Ing.): derechos de autor; gym (Ing.) gimnasio; accesar (Ing. to access): acceder

Algunas ventajas de conocer la etimología de las voces

1) Si se conoce la etimología de una voz, se retiene mejor el significado de ésta.
2) Sirve para aprender a formar correctamente las voces derivadas o compuestas. Por ejemplo, si sabemos que
    madre viene de mater, podemos deducir que son derivadas: madrina, matricidio, matriz, materno, maternal.
3) Comprendemos mejor el léxico especializado de varias áreas del conocimiento, tales como las Ciencias
    Naturales (nombres científicos de plantas), la Literatura (nombres de figuras retóricas), la Filosofía.
4) Ayuda a descubrir la afinidad entre dos idiomas. Por ejemplo: notamos que tanto en español como en inglés,
    las palabras libertad y liberty tienen el mismo origen (del lat. libertas o libertatis).

¿Por qué estudiar raíces griegas y latinas?
     La cultura griega es quizá la más importante de la historia de la humanidad. Nuestra civilización se ha enriquecido con los aportes de esta antigua cultura en la literatura, las artes y la filosofía.
     Las bases de las matemáticas son griegas. Euclides dominó la geometría por más de dos mil años. Arquímedes y Hierón crearon la física; Hipócrates y Galeno la medicina; Aristóteles, la zoología, la psicología y la metafísica; Heródoto, Tucídides y Jenofonte, la historia; etc.
     Entonces, ¿por qué estudiar las raíces griegas y latinas? Porque nos permite conocer el significado del léxico relacionado con cada una de esas áreas del conocimiento. No olvidemos que muchos neologismos de origen científico y tecnológico se han formado del griego. Por ejemplo: mecanografía, taquigrafía, helicóptero, fotografía, teléfono, telegrafía, micrófono, cinematógrafo, cardiólogo, zootecnia, pedagogía, filosofía, etc.
     También debe recordar que gran parte de las voces españolas que hemos tomado del latín, son de origen griego. Citemos unos ejemplos: música, problema, biblioteca, botica, horizonte, comedia, tragedia, blasfemia, melancolía, cristal, misterio, diamante.
     Hacia el año 150 antes de Cristo, Roma vence a Grecia. Pero el poder militar bien poco pudo someter las bases de aquella cultura de fina sensibilidad, elegancia y armonía que se imponía en las instituciones educativas. Y el gran siglo de la cultura latina crece a la sombra de la griega. Por eso es que la cultura de Roma es greco-latina.
     ¿Sabe usted que tres de cada cuatro palabras del español son latinas? El latín y el griego son lenguas que nos legaron su riqueza y su valor, porque nos han permitido ampliar nuestras posibilidades expresivas, para llamar las cosas por su nombre. Y como dice un académico mexicano, "...llamar a las cosas por su nombre es una manera de expresar su esencia".

Raíces Latinas: significado y ejemplos
Raíces griegas: significado y ejemplos
acqua (agua): acuático, acuario, acuífero
hydro (agua): hidroavión, hidráulico,
aequĭtas, aequitātis (igualdad): equitativo, equidad
homo (igual): homogéneo, homófono
ambo, ambi (ambos): ambiguo, ambivalente
amphi (doble, alrededor): anfibio, anfiteatro
bi, bis (dos): binomio, bizco, bifurcado,
di (dos): díptero, dicotomía,
caballus (caballo): caballería, cabalgar
hyppos (caballo): hípica, hipocampo (caballo de mar)
caput, capitis (cabeza): capital, decapitar, caput mundi
kephalé (cabeza): acéfalo, cefalea, hidrocefalia
cord (corazón): cordial, misericordia
kardio (corazón): cardiaco cardiólogo
dent (diente): dentista, dental
odóntos (diente): odontología, ortodoncia
deus (dios): divino, endiosar, deísmo
theo (dios): teología, ateo,
di, dis (oposición, propagación): disentir, difundir
di (dos): díptero, díptico (dos paneles)
forma (forma): formal, reformar
morpho (forma): amorfo, metamorfosis
homo, homĭnis (hombre): homínido, homicidio
anthrŏpo (hombre): antropomorfo, antropoide
lac, lactis (leche): lácteo, lactante, deslactosada
aktos (leche): galaxia, lácteo
medium (medio, centro): mediodía, mediterráneo
hĕmi (medio, mitad): hemiciclo, hemisferio, hemistiquio
multi (muchos): muchedumbre, multitud
poly (muchos): polígamo, polifacético, poliandria
nomen, nomĭnis (nombre): nómina, pronominal
ónoma (nombre): onomástico, sinónimo, antónimo
novus (nuevo): novedad, renovar
neo (nuevo): neófito, neonato, neologismo
ossum (hueso): óseo, osario, osamenta
ostéon (hueso): osteoporosis, osteolitos
sonĭtus (sonido): sonoro, sonido
phŏno (sonido): afonía, fonética
tempus (tiempo): temporal, atemporal
khronos (tiempo): cronometrar, crónico
terra (tierra): terráqueo, terreno,
geo (tierra): geología, geografía
vita (vida): vital, vitalicio, vitalidad
bio, bios (vida, organismo vivo): biosfera, biología
macs